En Italia dos monjas carmelitas están en huelga. El motivo: no les dejan volver a su convento (de clausura) tras haber tenido que salir de él por motivos de salud. Hace unos días se encadenaron en la Plaza de San Pedro para hacerle llegar al Papa Benedicto XVI su problema. Según una de ellas, la hermana Albina Locantore (73 años), "después de 50 y 60 años de vida monástica dedicada a la Iglesia, nos echaron a la calle sin recursos como dos bolsas de basura". Su compañera, Teresa Izzi (79 años) piensa igual mientras mantiene una pancarta donde se puede leer "Santidad, no somos ni protitutas, ni violentas, ni ladronas, ni enfermas mentales".
El Vaticano aun no ha emitido ningún comunicado al respecto de este tema.
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